Villarrica: Confundieron a guardiacárcel de Tacumbú con recluso trasladado en Operativo Veneratio

• El agente tuvo que ser identificado a través del Sistema AFIS para confirmar que se trataba de un guardiacárcel.
• Cristhian Matto, director del nosocomio, explicó que recibieron la directriz de que recibirían solo personas privadas de libertad para un diagnóstico y ser atendidos de sus lesiones.
• El funcionario llegó al hospital con el grupo de 320 personas que fueron trasladadas desde la penitenciaría capitalina.

Una multitudinaria visita recibió el Hospital Regional de Villarrica tras el Operativo Veneratio ejecutado en la madrugada del lunes en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, donde se registró una llamativa situación. El doctor Cristhian Matto, director del citado nosocomio explicó a los medios locales que en medio de los 320 reclusos que debían ser atendidos, se encontraba un guardiacárcel.

“Nos dijeron que iban a venir solo reclusos”, manifestó el médico asegurando que no supieron qué pasó realmente porque le recibieron a la gente para cumplir con un protocolo de rigor.

“Refería que era guardiacárcel que vino de Tacumbú con los presos. Para asegurar que era la persona que decía ser, llamamos a la gente de Identificaciones para ver por sistema Afis, así mismo fue como estaba refiriendo y sí trabaja en Tacumbú y solicitaba su traslado a un sanatorio privado porque tiene seguro de su trabajo”, señaló Matto.

Explicó que la situación se dio debido a que no le conocían a los pacientes y hubo mucho movimiento de personas, por lo que debían tener datos certeros de que sí era la persona que refería y también funcionario de Tacumbú.

El guardiacárcel presentaba una fractura por arma de fuego en el antebrazo. Fue atendido por los traumatólogos, se le brindó la asistencia necesaria. Posterior, él mismo solicitó su traslado a un centro privado, teniendo en cuenta que contaba con seguro médico correspondiente a su trabajo.

Explicó que la labor de ellos era hacer un relevamiento sobre la situación de cada paciente para luego remitir a la cárcel el estado de cada uno y recomendar el traslado a la sanidad. “Era clasificar y darle los primeros auxilios. Era un operativo muy rápido y que se tenían que mover para no estar mucho tiempo en un solo lugar”, expresó.

Los médicos tenían como tarea prestar primeros auxilios, atención primaria. Luego serían reclasificados para ser derivados a distintos destinos y recomendar quiénes debían recibir atención en la sanidad del penal villarriqueño.

Entre las 320 personas, apenas 50 eran las que presentaban lesiones leves. “Más eran escoriaciones, rastros de balines de goma y nada más, nada que amerite una internación o algo más. Se pelaron el codo, la rodilla, el hombro y algunos que tenían heridas de balines de goma”, acotó.