EE.UU. apunta a Venezuela como posible refugio de Marset
- El gobierno de Donald Trump acusa formalmente a Sebastián Marset de lavar dinero del narcotráfico a través de bancos estadounidenses.
- Washington sospecha que el narcotraficante uruguayo se esconde en Venezuela, aunque el dato aún no fue confirmado.
- EE.UU. ofrece hasta dos millones de dólares por información que lleve a su captura o condena.

El gobierno del presidente Donald Trump dio un paso decisivo este miércoles en la búsqueda del narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, al presentar una acusación formal por “lavado de dinero” y lanzar una recompensa millonaria por su captura. Las autoridades estadounidenses sospechan que el fugitivo podría estar oculto en Venezuela, aunque no han confirmado su paradero con certeza.
“El paradero (de Marset) quizás está en Venezuela, aunque no está confirmado. Hay unas noticias que están diciendo que Venezuela es el lugar más probable”, declaró Cartwright Weiland, alto funcionario de la Oficina de Asuntos Internacionales sobre Narcóticos y Aplicación de la Ley, durante una conferencia de prensa virtual.
Según informó el Departamento de Estado, Marset utilizó ganancias del tráfico de drogas para operar a través de instituciones financieras estadounidenses. Las autoridades lo acusan de mantener una fachada de lujo para disimular sus actividades criminales. “Marset se esconde vergonzosamente detrás de su aspecto de villano de cine mientras compite en carreras de coches deportivos y se compra un equipo de fútbol”, añadió Weiland, en referencia a los métodos que utilizó años atrás para camuflar su rol dentro del narcotráfico internacional.

El comunicado del Departamento de Estado anunció también una recompensa de hasta dos millones de dólares por información que conduzca al arresto o condena del narcotraficante en cualquier parte del mundo.
Sebastián Marset es uno de los fugitivos más buscados del Cono Sur y figura central en una extensa investigación sobre el crimen organizado en Paraguay. Junto a su esposa, Gianina García Troche, huyó de su residencia en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, en julio de 2023, un día antes de un megaoperativo de la policía boliviana que tenía como objetivo su captura. Desde entonces, su paradero ha sido un misterio, y los esfuerzos internacionales por localizarlo se intensifican a medida que surgen nuevas pistas.