Todos se prestaron a la orquestación delictiva de Diego González Torres
- Nula garantía municipal para ciudadanos de Coronel Oviedo que se ven vulnerados en sus derechos.
- El caso de polución sonora denunciado por la ciudadana, Celia Verdun, evidencia la manipulación institucional por parte del presidente de la Junta Municipal, Diego González Torres.
- Funcionarios municipales, incluido el Juez de Faltas, Guzman Guerrero, avalaron un documento para que Azucena Eventos siga violando la Ordenanza 003/2023.
El presidente de la Junta Municipal de Coronel Oviedo, Diego González Torres, se dio por enterado a través de nuestro medio una grave denuncia por polución sonora realizada por la ciudadana, Celia Verdún, vecina del local denominado Azucena Eventos.
Afirmó que él mismo se iba a encargar de dar seguimiento a la denuncia ciudadana, que la afectada lleva realizando por más de seis años.
Y así lo hizo, pero para favorecer a la denunciada y no a la denunciante. El miércoles de la semana pasada configuró un equipo que visitó a la ciudadana Celia Verdún, vendiendo la esperanza de que sería resuelto el problema para su tranquilidad.
Nada de eso pasó. Diego González Torres, quien juró cumplir y hacer cumplir las leyes, fue quien orquestó todo para que fuera violada la Ordenanza 003/2023, promulgada durante su mandato como concejal municipal.
Redactó un acuerdo falso del que se habla de una comparecencia de las partes ante la institución municipal y en el que supuestamente la denunciante prestó su acuerdo para que la empresa de eventos siga operando en la irregularidad, produciendo sonido fuerte y vibraciones que afectan a la tranquilidad y a la estructura de la vivienda de la ciudadana Celia Verdún.
González Torres maquinó para que el juez de faltas, Guzman Guerrero, en un acto de prevaricato haya firmado el supuesto acuerdo que no dice lo que la funcionaria, Susana Benítez, asesora jurídica de la municipalidad, dice que dice el acuerdo.
Se burló de todos, de los funcionarios municipales, de la ciudadana Celia Verdún y le hizo cometer un acto ilegal al Juez de Faltas, de quien dice ser amigo personal.
Diego González Torres es un peligro para la institucionalidad y para la ciudadanía. ¿Opera a favor de quienes les paga? ¿A favor de sus amigos y pone en riesgo a toda la institución municipal y a los funcionarios?
El Jefe de Gabinete, Edgar Bernal, aseguró que serán tomadas todas las medidas para responder favorablemente a la denunciante y hacer cumplir la ordenanza vigente que regula la emisión de ruidos molestos.
La asesora jurídica, Susana Benítez, la semana pasada afirmó que serán aplicadas las sanciones de multas establecidas en la ordenanza y que dispondría que, durante la regularización del local, serían suspendidas sus actividades.
Nada de eso pasó, quedan como mentirosos y dejan al intendente, Marcos Benítez, como el empleadito de ellos y no como la máxima autoridad de la ciudad, porque hicieron todo lo que no debieron hacer y así exponen a mal desempeños de sus funciones al intendente que, tal vez ni siquiera esté enterado que fue involucrado en la orquestación de Diego González Torres para garantizar la impunidad a las violaciones a las ordenanzas emanadas de la Junta Municipal, del cual es presidente, cargo que utilizó para traficar influencias y actuar en contra el interés ciudadano para favorecer el interés personal.