Rompiendo esquemas: Dos mujeres albañiles desafían estereotipos en Coronel Oviedo
- Natalia Bareiro y Rosa Osorio trabajan como albañiles en Coronel Oviedo, destacando por su dedicación y valentía en un entorno mayoritariamente masculino.
- A sus 18 años, Natalia Bareiro sueña con ser policía mientras trabaja como ayudante de albañil desde los 12. Su tía, Rosa Osorio, de 27 años, desde pequeña ejerce el oficio que heredó de su padre.
- A pesar de los desafíos, Natalia y Rosa se sienten cómodas en su trabajo y reciben un trato igualitario, alentando a otras mujeres a seguir sus pasos en un campo tradicionalmente dominado por hombres.
Dos jóvenes mujeres albañiles están desafiando estereotipos en Coronel Oviedo. Natalia Bareiro, de 18 años, contó su historia al programa Hablando Claro emitido por Radio Mundo Sol mientras trabaja en una obra de construcción.
Desde los 12 años, empezó a trabajar como ayudante de albañil, siguiendo los pasos de su abuelo y su tío en el rubro. “Hago todo lo que ellos hacen”, afirmó con orgullo.
Actualmente, trabaja en la construcción de un casino junto su tía y un tío. “Somos dos mujeres”, acotó señalando cómo se destacan en un equipo donde además hay al menos 15 hombres. A pesar de eso, se siente cómoda, sostuvo. “La verdad que te tratan como un hombre más”, expresó al respecto.
Mientras trabaja desde las 7:00 hasta las 17:00, con pausas para el tereré a las 9:30 y 14:30, Natalia también se prepara para seguir su sueño de ser policía. “Los sábados me voy al cursillo para el ingreso”, reveló, destacando su determinación al ahorrar para pagar los costos necesarios.
La otra albañil de la obra es su tía Rosa Osorio, de 27 años, quien también compartió su experiencia con Hablando Claro. “Siempre trabajé desde chiquita porque mi papá trabajó en construcción”, indicó.
Ella llegó a la obra en febrero, uniéndose a Natalia y su cuñado Juan Carlos Ocampos. Además de su rol de trabajadora de la construcción también cumple el rol de madre de una niña de 2 años, aunque esta se queda con su abuela mientras Rosa está trabajando.
Osorio, mencionó al igual que su sobrina que no ve diferencias en el trato que reciben por parte de los varones. “Nos tratan muy bien, somos un buen equipo”, comentó.
Ambas mujeres destacan que el trabajo en la construcción no tiene género y animan a otras mujeres a seguir sus pasos. “Yo le motivaría a las mujeres que trabajen en esto, que no se preocupen por lo que dicen los demás”, afirmó Natalia. “Se gana bien”, agregó Rosa. La determinación y valentía de ambas son inspiradoras, rompiendo esquemas y demostrando que el trabajo duro y la pasión no tienen género.