Roban motocicleta de una despensera frente a una escuela, en barrio Capitán Roa
- La víctima contó que hace 14 años el biciclo era su compañero del día a día y que le costó creer que le robaran teniendo en cuenta que era viejita la moto y, había otra más grande y nueva a su lado.
- El hecho es uno más de los que ocurren a diario en nuestra ciudad. Vicente González, vecino del barrio Cerrito Ryguá contó que todos los días reciben visita de delincuentes hacia su zona.
- Otra víctima de los delincuentes, Laure Galeano, contó que ya identificaron a los autores que entraron a su casa en Potrerito, pero con mucha batalla de por medio para mover la estructura policial.
En Coronel Oviedo, la inseguridad sigue siendo motivo de preocupación para los ciudadanos. Los casos de robos que afectan a comerciantes y vecinos dejan en vilo constante a varios barrios. En esta ocasión, Ramona González fue víctima de un robo frente mismo a la Escuela Capitán Roa (barrio del mismo nombre), convirtiéndose en la última afectada por esta ola delictiva.
González, quien atiende copetín y despensa en el lugar, relató que el robo ocurrió luego de que decidieran trabajar un domingo más tarde de lo habitual. Al cerrar el local, apenas media hora después, escuchó el ruido de su moto. Incrédula le pidió a su marido que le eche un vistazo y ahí notó que su motocicleta había sido sustraída.
Mencionó que, afortunadamente, los ladrones no se llevaron una moto más grande que también se encontraba en el lugar, debido a la presencia de vecinos en las cercanías. “Realmente duele porque cualquier cosa que te sacan es doloroso. Uno sabe lo que le cuesta tener las cositas y darte cuenta de la inseguridad que estamos viviendo. Cada día estamos peor”, lamentó González.
Su motocicleta era una compañera de trabajo vital y diaria para ella durante los últimos 14 años. “Feita, viejita ya, pero útil”, puntualizó la víctima, calificándola como una “heroína”. Su local ya había sido blanco de asaltantes hace alrededor de 7 años, cuando su esposo recibió un disparo. Desde entonces había quedado con el miedo latente de que vuelva a suceder algo similar, nunca le dejó ese miedo de que llegue un extraño y les robe.
“Después de 7 años es la primera vez que pasamos. Siempre hay vizcacheros y eso, que llevan lo que encuentran, pero nunca motos. Esta vez nos tocó a nosotros. Pero es impresionante la seguridad que se están moviendo. Ahora ni siquiera la silla vamos a dejar afuera, ya que con tanta tranquilidad llevaron. Seguramente vieron los movimientos, tenemos cámara de seguridad de la comisión. Aunque sea vamos a ver, no sé si va a servir, pero… duele mucho que estemos pasando por esto. Cada día estamos peor”, expresó.
Inseguridad en Cerrito Rygua
En otra parte de la ciudad, en el barrio Cerrito Rygua, Vicente González y su familia también han sido blanco de robos recientes. El último episodio fue la semana pasada cuando su nuera sufrió el robo de una moto Leopard. Antes de eso, recibieron la visita de los malhechores en su vivienda donde llevaron una bicicleta de competición de su hijo.
Luego, su vecino fue la víctima de turno, sufriendo el robo de una desmalezadora. Al día siguiente entraron a la casa de otro vecino llevando artefactos eléctricos y una moto.
“Sinceramente pensamos que es gente de otros barrios. El seguimiento que hicimos, vimos más o menos el lugar donde se llevó. Nos fuimos a ver dónde más o menos fue a parar, llevamos la denuncia a Investigaciones, pero ya pasó un mes. Sobre la cuestión de la moto, creemos también que es hacia la misma zona que se llevó”, expresó.
El aguantadero estaría hacia el barrio Primero de Marzo, indicó lamentando la falta de respuesta por parte de las autoridades. “No hay caso, no hay respuestas. Nosotros esperábamos algo más certero con respecto a la detención”, señaló.
Situación calcada
“Es calcada la situación y los sentimientos que uno tiene”, expresó Laure Galeano sobre las situaciones parecidas entre su caso y el de Ramona. El comunicador semanas atrás también fue víctima de robo por parte de desconocidos en su propia casa en el barrio Potrerito.
“Quiero hacerme cargo de lo que voy a decir. El jefe de policía de la zona es un haragán, es un tipo al que no le interesa en absoluto la prevención. Afortunadamente me tocaron muy buenos oficiales que tienen todavía el sentido de servidor público. Pero muchos de los subalternos, me dicen que el que corta las alas y el que limita el accionar de ellos es el jefe de policía y están cansados. Son 20 a 25 agentes me dijeron esto”, sostuvo la víctima.
En Investigaciones ocurre exactamente lo mismo, señaló, asegurando que existen excelentes oficiales, pero la cabeza “no tendría que estar donde está”. “Hay muy buenos agentes, con muy buena predisposición, pero la cabeza está podrida”, manifestó.
En el caso del robo de su biciclo hay tres presuntos implicados, uno de ellos confeso como cómplice. Mencionó que también se sabe el supuesto paradero que sería por la zona nada más. “Por dimes y diretes, la moto sigue intacta y oculta gracias a que esta situación se viralizó”, celebró en parte.
Dijo que en su barrio hay alrededor de 15 hechos de robo, asalto y coacción sexual y no hay un solo caso resuelto. “Eso da la pauta de qué tan ineficientes son las tomas de decisiones por parte de quiénes deben comandar esto. Cada noche hay un hecho de robo agravado y son probablemente los tres los que están causando estragos”, lamentó.