Por negligencia en hospital Regional de Coronel Oviedo, perdió bebé y quedó con restos de placenta en el vientre

• El bebé murió en el vientre de su madre tras ser enviada a casa con cuatro centímetros de dilatación, dos días después la mujer perdió a la criatura.
• Diez días después de la pérdida del bebé, los médicos del Hospital Regional de Coronel Oviedo detectaron que habían dejado restos de placenta en el cuerpo de la madre, lo que obligó a una intervención de emergencia.
• “Esto no fue voluntad de Dios, fue voluntad de los profesionales”, con estas palabras, Alberto Franco describió su dolor ante la pérdida de su bebé de 37 semanas.

Una grave denuncia de presunta negligencia médica sacude nuevamente al Hospital Regional de Coronel Oviedo. Alberto Franco, padre de un bebé fallecido en el vientre de su madre, relató el calvario que atraviesa junto con su esposa, quien ahora está internada tras haberse detectado que los médicos dejaron restos de placenta en su cuerpo.

El caso comenzó hace 15 días, cuando la mujer, con 37 semanas de embarazo, acudió al hospital con una dilatación de 4 centímetros. Según Franco, los médicos les recomendaron volver a su casa porque consideraban que aún faltaban semanas para el parto. Dos semanas después, el bebé murió en el vientre.

“Mi señora estaba embarazada y todo iba bien. Nos internaron, pero al cambiar de turno nos dijeron que volviéramos a casa porque no querían apurar el nacimiento del bebé. Dos semanas después, el bebé falleció. Vinimos al hospital con el bebé muerto el lunes 17, y le hicieron tener el parto normal. Ahora, diez días después, volvemos al hospital porque dejaron restos de la placenta en su cuerpo”, relató el padre en contacto con el programa Hablando Claro emitido por Radio América 95.3 FM.

El hombre, visiblemente afectado, señaló que el trato recibido en el hospital fue negligente y que nunca les explicaron los riesgos. “Esto duele. Tengo un hijo de 5 años que me pregunta por su hermanito. Esperamos al bebé durante ocho meses y ellos nos hicieron esto. No fue voluntad de Dios, fue voluntad de los profesionales”, expresó.

La situación escaló cuando ayer su esposa empezó a sentirse mal y decidieron nuevamente llegar hasta el hospital, donde descubrieron que no se había retirado completamente la placenta, lo que obligó a una nueva intervención para limpiar el útero de la madre.

Franco explicó que decidió hacer pública la denuncia “para que la ciudadanía se entere de lo que está pasando con muchos padres y madres de familia”. Lamentó además la falta de comunicación por parte del personal médico, ya que según indicó era necesario insistir para obtener información sobre el estado de su esposa. “Ahora mismo tuve que preguntar qué tal estaba mi señora, qué lo que pasaba y así únicamente ellos te dicen. Vos tenes que preguntar. Ahora está bien gracias a Dios”, refirió.

Actualmente, la mujer se encuentra internada y, según Franco, su estado es estable. Sin embargo, el impacto emocional y físico de lo ocurrido dejó devastada a la familia. “Sinceramente me iba a callar, pero surgió esto de la placenta de nuevo. Entonces recurrí a la prensa”, finalizó.