Padres de la Escuela Repollito siguen en manifestación hasta tener respuesta del director departamental
- Padres acusan a la ex presidenta de la Asociación de Cooperadores Escolares (ACES) de estar detrás de la remoción de la directora.
- La denuncia llegó seis meses después del supuesto hecho, el caso que motivó la destitución fue presentado a la Fiscalía pocos días antes del inicio de clases, lo que genera sospechas entre los padres.
- Familias movilizadas aseguran que la ACES busca controlar la escuela para manejar licitaciones y recursos sin oposición.
La Escuela Repollito enfrenta un nuevo escándalo: la destitución de su directora, quien, según un grupo de padres, habría sido removida injustamente tras una denuncia de maltrato infantil realizada seis meses después del supuesto hecho.
Fátima Martínez, madre brindó su testimonio en una entrevista con el programa Hablando Claro, transmitido por Radio América 95.3 FM. Durante la conversación, señaló que la denuncia surge en un contexto de disputa interna dentro de la institución. Según explicó, días atrás hubo intentos de reorganizar la ACES con una asamblea que generó tensiones, ya que algunos padres denunciaron irregularidades en el llamado y en el proceso de elección de autoridades.
“La denuncia no tiene ni pies ni cabeza”, afirmó Martínez, destacando que la directora removida obtuvo su puesto por concurso en el Ministerio de Educación y que su gestión contaba con el respaldo de muchas familias. Además, cuestionó que la acusación se haya hecho pública justo antes del inicio de clases, generando incertidumbre en la comunidad educativa.
Los padres que apoyan a la directora sostienen que detrás de su destitución hay intereses económicos y de poder. Apuntan directamente a la ex presidenta de la ACES, María Fretes, y a un grupo reducido de personas que, según denuncian, buscan manejar la institución a su conveniencia.
Martínez mencionó que existen licitaciones para obras en la escuela y que la ACES pretende controlar los recursos sin oposición. “Queríamos abrir la cantina, pero fueron a amenazar al responsable diciendo que era ilegal. También bloquearon el funcionamiento de la fotocopiadora”, denunció.
Frente a esta situación, un grupo de padres se organizó para exigir la restitución de la directora y convocó a una manifestación pacífica en la puerta de la escuela. Sin embargo, quienes están del otro lado del conflicto los acusaron de querer perjudicar el inicio de clases.
“El problema es que estas situaciones se repiten todos los años en la escuela. Siempre hay conflictos, y al final los perjudicados son los niños”, expresó el entrevistador durante la charla.
Por ahora, la supervisora y el director departamental no han ofrecido una solución concreta al problema. Mientras tanto, la comunidad educativa sigue expectante y movilizada, exigiendo respuestas y denunciando la politización de la educación.
“Lo único que queremos es que vuelva la directora y que se haga justicia. No se puede permitir que intereses personales afecten la educación de los niños”, concluyó Martínez.
