Paraguaya detenida en Brasil por presunto caso de racismo en torneo de fútbol
- Una madre paraguaya fue detenida en Lavínia, São Paulo, acusada de presunto racismo durante un torneo de fútbol infantil.
- Lucía Amalia Insfrán Peralta fue señalada por un técnico local de haber proferido expresiones racistas contra un jugador rival.
- Óscar, esposo de la detenida, relató que desconoce el paradero de su esposa y que no cuenta con abogado.
Una ciudadana paraguaya fue detenida en el estado de São Paulo, Brasil, tras ser acusada de presunto racismo durante un torneo de fútbol infantil. Su esposo negó la acusación y solicitó asistencia de las autoridades paraguayas en el país vecino.
El hecho ocurrió en el municipio de Lavínia, donde Lucía Amalia Insfrán Peralta, madre de un jugador del equipo Auriazul de Luque, fue arrestada el pasado viernes. Según el relato de su esposo, Óscar, la familia viajó hasta Brasil para acompañar a su hijo en la disputa por el tercer o cuarto puesto del torneo.
Según su testimonio, el público local los recibió con insultos y gestos despectivos durante el partido. Tras un gol de su equipo, celebraron ante la hinchada rival, momento en que un técnico identificado como influencer de la zona acusó a Lucía de haber proferido la palabra “macaco” hacia un jugador contrario, además de hacer gestos considerados racistas.
La mujer fue detenida y trasladada a una comisaría, para luego ser llevada a otro centro de reclusión. Su esposo, entre lágrimas, relató que no cuenta con asistencia legal y que desconoce el paradero exacto de su esposa. “Estoy solo, no tengo abogado y no sé dónde está mi esposa”, manifestó en comunicación con un medio capitalino.
Desesperado, contactó con la Embajada de Paraguay en Brasil, donde le indicaron que debe comunicarse con la fiscala a cargo del caso. Sin embargo, la situación se complica por la barrera del idioma, ya que Óscar no maneja el portugués y enfrenta dificultades para comunicarse en español.
El racismo en Brasil es considerado un delito grave, con penas que pueden alcanzar hasta cinco años de prisión. Hasta el momento, las autoridades paraguayas no han emitido una postura oficial sobre el caso.