Neneco Acosta fue declarado culpable
- El ex intendente de Ypejhú, Vilmar Neneco Acosta, procesado por el asesinato del periodista Pablo Medina y su asistente Antonia Almada, fue declarado culpable este jueves por un Tribunal de Sentencia.
Acosta fue hallado culpable de homicidio doloso en calidad de instigador, por el Tribunal de Sentencia que estuvo presidido por el juez Ramón Trinidad Zelaya e integrado por Benito González y Janine Ríos.
Las pruebas presentadas por la Fiscalía fueron irrefutables para los jueces, que declararon la culpabilidad. Al mediodía de este jueves se realizó la lectura resolutiva sobre la existencia del hecho y la reprochabilidad de Vilmar Acosta en el caso Pablo Medina.
El periodista del Diario Abc Color había realizado varias publicaciones sobre el vínculo del ex intendente y su familia con el narcotráfico.
El Ministerio Público, en sus alegatos finales, solicitó declarar culpable a Acosta por instigar el crimen del periodista y de su asistente Antonia Almada. El hecho ocurrió el 16 de octubre del año 2014 en Villa Ygatymí, Canindeyú. Medina fue emboscado y falleció a causa de las heridas provocadas por armas largas, al igual que Almada.
Los fiscales Sandra Quiñónez y Vicente Rodríguez presentaron sus conclusiones en la primera parte del juicio oral, donde fue hallado culpable. Ahora se desarrolla la segunda parte, donde se pedirá la pena, que sería, según la solicitud de la Fiscalía, de 30 años por el doble homicidio más 10 años como medida de seguridad.
Más de 40 testigos propuestos por los agentes declararon ante el Tribunal.
Acosta está actualmente recluido en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú.
Las pruebas documentales, periciales de computadoras, aparatos telefónicos y otros medios de prueba y trabajos de peritos –donde Pablo Medina fue interceptado– señalan que el asesinato fue por orden del entonces jefe comunal.
Los supuestos sicarios son Wilson Acosta Marques, quien es hermano de Neneco y se encuentra prófugo de la Justicia, y Flavio Acosta Riveros, quien está detenido en el Brasil.
Para el Ministerio Público, se probó con los testigos y cruces de llamadas que el entonces político estuvo en comunicación con los autores del hecho antes y después del atentado.
