Médicos advierten que fármacos para bajar de peso pueden causar graves efectos colaterales
- El uso sin receta de medicamentos para bajar de peso, como la semaglutida, genera alarma entre endocrinólogos paraguayos.
- La Sociedad Paraguaya de Endocrinología advierte sobre consecuencias como vómitos severos, pérdida de masa muscular y hasta pancreatitis.
- La doctora Fabiola Romero remarca que estos fármacos “no curan la obesidad, solo la controlan, y deben usarse bajo estricta supervisión médica”.

La creciente popularidad de fármacos como la semaglutida para perder peso encendió las alarmas entre los especialistas en Endocrinología en Paraguay. Aunque inicialmente desarrollado para tratar la diabetes tipo 2, este medicamento ha ganado notoriedad por sus efectos sobre el control del apetito y la reducción de peso. Sin embargo, su venta libre en farmacias paraguayas preocupa profundamente a los profesionales de la salud.
La doctora Fabiola Romero, presidenta de la Sociedad Paraguaya de Endocrinología, explicó los riesgos de la automedicación con este tipo de productos. “En muchas ocasiones solicitamos al Ministerio de Salud que esto se dé bajo receta médica. Hasta el momento, lastimosamente, sigue siendo sin receta, pero hay que advertir que tiene riesgos si no se utiliza bajo un seguimiento médico estricto, sin tener indicación, y que puede presentar efectos colaterales”, advirtió.
Entre las principales reacciones adversas se encuentran molestias gastrointestinales como “náuseas, vómitos, malestar estomacal, dificultad para digerir, estreñimiento, diarrea”. Según la experta, estos síntomas pueden agravarse si el paciente no sigue un plan alimentario adecuado y tiene hábitos como el consumo excesivo de alcohol o la glotonería, llegando incluso a “vomitar sin parar”.
Otro efecto colateral preocupante es la pérdida de masa muscular, un aspecto crucial para mantener la salud en la mediana edad y, especialmente, en la vejez. La semaglutida actúa retrasando el vaciado gástrico y provocando una sensación de saciedad que, si no es acompañada de una dieta balanceada y supervisión médica, puede llevar a desequilibrios graves.
La doctora Romero también advirtió sobre vínculos entre el uso de este fármaco y el cáncer medular de tiroides (CMT), una enfermedad poco común pero hereditaria. “No lo deben utilizar personas que tengan antecedentes familiares de cáncer medular de tiroides o que tengan factores de riesgo que son compatibles con cáncer medular de tiroides”, sostuvo.

Además, el uso inadecuado puede derivar en pancreatitis, especialmente en personas que consumen alcohol con frecuencia, así como en la formación de cálculos biliares.
“El tratamiento puede ser indefinido, la obesidad es una enfermedad crónica, así como la hipertensión. Uno logra controlarlo. Estos fármacos no lo curan, lo controlan”, concluyó la especialista, reiterando el llamado a una regulación más estricta para evitar que la búsqueda de soluciones rápidas se convierta en un problema mayor para la salud pública.