Madre pide ayuda para tratamiento de epilepsia de su hija
- La falta de especialistas en epilepsia infantil en Coronel Oviedo obliga a Mariza Peña a viajar mensualmente a Asunción para el tratamiento de su hija de 10 años.
- Esto representa un significativo desafío económico para su familia, ella gasta aproximadamente 600.000 guaraníes cada vez que viajan.
- La situación de Mariza se complica por la falta de medicamentos específicos en el IPS. Aunque el instituto provee medicinas, no cuenta con Cronoval de 250 mg, la dosis necesaria para su hija.
La deficiencia en el sistema de salud es una realidad alarmante que afecta a numerosas familias en Coronel Oviedo. Mariza Peña, una madre dedicada, enfrenta esta situación diariamente mientras lucha por el bienestar de su hija de 10 años, quien sufre de epilepsia.
Mariza y su hija residen en el asentamiento La Gloria II en Coronel Oviedo. Debido a la falta de especialistas en epilepsia infantil en su propia ciudad, deben viajar mensualmente al Instituto de Previsión Social (IPS) Central en Asunción para recibir tratamiento.
Estos viajes representan un gasto considerable para la familia, alrededor de 600.000 guaraníes cada vez, lo que se traduce en un desafío económico significativo.
“Mi hija tiene diez años, nos vamos al IPS central de Asunción para el tratamiento. Ella nació así y a los 8 años se agravó su condición y se quedó internada en Asunción”, comentó la mujer al programa Hablando Claro emitido por Radio Mundo Sol. “Cada vez que viajamos gastamos más o menos 600.000 guaraníes. Nos vamos una vez al mes”, agregó.
La situación se complica aún más con la necesidad de medicamentos específicos. El IPS provee medicamentos, pero no siempre los adecuados para su hija. “El remedio hay en IPS, pero no el que ella necesita. Ella necesita Cronoval de 250 mg, y solo hay de 100 mg”, explicó Mariza.
La presión financiera es inmensa. Mariza tiene tres hijos y su esposo, quien trabaja arduamente, debe pedir adelantos a su patrón para cubrir los gastos del tratamiento. “Demasiado gastamos. Yo vengo y sufrimos demasiado. Mi marido trabaja, pero para que nos vayamos tiene que pedirle a su patrón adelanto”, refirió.
Mariza hizo un llamado desesperado a la comunidad para recibir apoyo en sus viajes. “Lo que le pido a la gente es que me ayude para mi pasaje y mi viático”, refirió la madre.
Mencionó que la niña no está asistiendo al colegio porque la directora le aconsejó no llevarla, debido a la frecuencia de sus ataques. “Me dijo que no lleve porque pasa dos horas y tiene su ataque, pasa una hora y tiene su ataque”, lamentó. Para aquellos que deseen colaborar con Mariza y su hija, pueden contactarla al número (0984) 899-572.
