Los vehículos eléctricos transformarán la industria automotriz y ayudarán a descarbonizar el planeta
- Ese zumbido en la distancia es el sonido del concepto de movilidad cambiando para bien. Aunque persisten los retos para la electrificación del parque vehicular, también hay oportunidades por las que merece la pena luchar.
- Esto es especialmente evidente en las ciudades, donde las emisiones, la congestión y la seguridad constituyen los principales problemas actuales.
- La oportunidad actual de transformar la forma en que nos movemos se debe, fundamentalmente, a los cambios en tres áreas principales: la regulación, el comportamiento del consumidor y la tecnología.
Comportamiento del consumidor. El comportamiento y la concientización de los consumidores están cambiando a medida que más personas aceptan modos de movilidad alternativos y sostenibles.
Los viajes en el centro de la ciudad con bicicletas compartidas y patines eléctricos han aumentado un 60 por ciento respecto del año pasado, y la última encuesta de consumidores de McKinsey sugiere que el uso promedio de la bicicleta (compartida y privada) puede aumentar más de un 10 por ciento en el mundo pospandémico, en comparación con los niveles prepandémicos.
Además, los consumidores están cada vez más abiertos a las opciones de movilidad compartida. Más del 20 por ciento de los alemanes encuestados afirman que ya utilizan servicios de transporte compartido o ridge-pooling (el 6 por ciento lo hace al menos una vez a la semana), lo que puede ayudar a reducir los kilómetros recorridos por los vehículos y las emisiones.
Tecnología. Los actores del sector están acelerando la velocidad de la innovación tecnológica automotriz a medida que desarrollan nuevos conceptos de movilidad eléctrica, conectada, autónoma y compartida.
El sector ha atraído más de $400,000 millones de dólares en inversiones durante la última década, de los cuales unos $100,000 millones han llegado desde principios de 2020.
Todo este dinero se destina a empresas y start-ups que trabajan en la electrificación de la movilidad, la conexión de vehículos y la tecnología de conducción autónoma.
Estas innovaciones tecnológicas ayudarán a reducir los costos de los VE y a convertir la movilidad eléctrica compartida en una alternativa real a la propiedad de un coche.