La vacunación en retroceso por recortes y desconfianza: la ONU lanza una alarma mundial
- La OMS, Unicef y Gavi advierten sobre un preocupante aumento de epidemias en 138 países por la caída en la cobertura de vacunación.
- Desinformación, conflictos armados y recortes en la ayuda internacional están dejando a millones de niños sin inmunización básica.
- El número de niños sin vacunas rutinarias superó los 14 millones en 2023, revirtiendo décadas de avances en salud pública.

El mundo enfrenta una nueva amenaza sanitaria que no surge de un virus desconocido, sino de la pérdida de terreno frente a enemigos que ya se creían dominados. El sarampión, la meningitis y la fiebre amarilla —enfermedades prevenibles mediante vacunas— están en aumento a nivel global, según advirtieron el miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS), Unicef y la Alianza de Vacunas (Gavi), en el marco de la Semana Mundial de la Inmunización.
“Las vacunas han salvado más de 150 millones de vidas en las últimas cinco décadas”, expresó el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus. Sin embargo, esa conquista está hoy en riesgo. “Los recortes financieros que afectan a la salud mundial ponen en peligro estos logros conseguidos con tanto esfuerzo”, agregó, señalando que las epidemias de enfermedades inmunoprevenibles están creciendo a un ritmo alarmante.

Desde 2021, los casos de sarampión no han dejado de escalar. Solo en 2023, se estima que 10,3 millones de personas lo contrajeron, lo que representa un aumento del 20% respecto al año anterior. En los últimos 12 meses, se notificaron casos en 138 países y 61 de ellos registraron brotes epidémicos significativos, el número más alto desde 2019.
El problema no se limita al sarampión. En África, los contagios de meningitis y fiebre amarilla también subieron de forma considerable durante 2024. Las causas son múltiples: desinformación sobre las vacunas, aumento de crisis humanitarias, crecimiento demográfico y recortes presupuestarios. Aunque el comunicado no lo menciona directamente, estos recortes incluyen la reciente decisión de Estados Unidos de reducir significativamente su ayuda exterior en salud.
La directora de Unicef, Catherine Russell, advirtió: “La crisis mundial de financiación está limitando gravemente nuestra capacidad para vacunar contra el sarampión a más de 15 millones de niños vulnerables en países frágiles y afectados por conflictos”. Además, señaló que “los servicios de vacunación, vigilancia de la enfermedad y respuesta a los brotes ya están interrumpidos en casi 50 países, con contratiempos similares a los del periodo Covid”.
La pandemia dejó un legado complejo. Aunque los países intentan recuperar el terreno perdido, el número de niños sin vacunas rutinarias no deja de crecer: 14,5 millones en 2023, frente a 13,9 millones en 2022 y 12,9 millones en 2019. Lejos de ser una recuperación, se trata de un retroceso que amenaza con revertir décadas de avances en salud pública.
Ante este panorama, Gavi celebrará el próximo 25 de junio su conferencia de donantes con un llamado urgente: necesita al menos 9.000 millones de dólares “para proteger a 500 millones de niños y salvar al menos 8 millones de vidas entre 2026 y 2030”. Una advertencia clara de que la salud global no puede depender de voluntades variables ni de presupuestos intermitentes.