La RAE despide a Mario Vargas Llosa con honores y luto
- La Real Academia Española despide con luto oficial a Mario Vargas Llosa, académico desde 1994 y figura clave de la literatura hispánica.
- El escritor hispano-peruano, Premio Nobel y Cervantes, ocupó la silla ‘L’ de la RAE, que ahora quedará vacante tras su fallecimiento.
- Con su partida, se va la voz del último autor en lengua española galardonado con el Nobel, pero su legado literario permanece vivo.

Las banderas ondean a media asta frente a la sede de la Real Academia Española (RAE) en Madrid. Es lunes, y la institución del idioma rinde homenaje a uno de sus miembros más ilustres: Mario Vargas Llosa. La puerta principal, solemne, muestra una de sus hojas cerrada, como señal de respeto. Es un día de luto para las letras hispánicas.
El escritor hispano-peruano, fallecido recientemente, fue elegido miembro de la RAE el 24 de marzo de 1994. Ese mismo año, su obra fue reconocida con el Premio Cervantes, máxima distinción literaria en el ámbito hispano. Tomó posesión de su silla —la letra “L”— el 15 de enero de 1996, con un discurso que fue respondido por otro Nobel, el español Camilo José Cela. Desde entonces, su nombre acompañó a la institución en cada pleno, cada debate, cada defensa de la lengua.
Ahora, tras su partida, la RAE activó el protocolo de duelo. Las banderas permanecerán a media asta y la puerta parcialmente cerrada hasta que se celebre el próximo pleno. Será entonces cuando la silla “L” sea declarada vacante, y su nombre, con discreción y respeto, desaparecerá del perchero nominal. La silla que una vez ocupó Vargas Llosa quedará vacía, pero su legado seguirá habitando las estanterías del idioma.

A través de la red social X, la Academia expresó su pesar y envió condolencias a los familiares y amigos del autor. En su mensaje se percibe no solo la pérdida de un académico, sino la de un referente moral e intelectual de toda una era.
Vargas Llosa fue el último autor de habla hispana en recibir el Premio Nobel de Literatura, en 2010. Con él se cierra un capítulo de oro en la literatura universal. Paradójicamente, su despedida llega en la antesala del próximo Congreso Internacional de la Lengua Española, que se celebrará en Arequipa, su ciudad natal, este otoño. Él mismo propuso esa sede para la edición de 2023, que debió posponerse por las protestas sociales en Perú.

En esa tierra andina donde comenzó todo, la lengua española volverá a reunirse para celebrar su fuerza, su diversidad… y la memoria de uno de sus más grandes narradores. Desde Madrid hasta Arequipa, las letras lloran a Mario Vargas Llosa. Pero también lo celebran, con la certeza de que su voz, como sus personajes, seguirá resonando más allá de la página.