Fútbol sudamericano volvió a quedarse sin final
- YOKOHAMA. Con la derrota de Atlético Nacional el miércoles ante Kashima Antlers (3-0) en la semifinal del Mundial de Clubes, el fútbol sudamericano ve cómo su representante se queda fuera de la final por tercera vez en la historia del torneo.
Después de que el equipo colombiano hubiese llamado la atención del continente con su espectacular triunfo en la Copa Libertadores, acompañado por un fútbol vistoso y espectacular, la dura derrota ante el anfitrión puede poner en duda la salud del fútbol sudamericano. Según informo el medio digital abc.com.py
De las 12 veces, incluida la de 2016, que se ha celebrado el Mundial de Clubes con el actual formato (en 2000 se disputó una primera edición experimental con otro sistema), el campeón de la Copa Libertadores ha quedado fuera de la final en tres ocasiones, mientras que el representante europeo, la otra gran región futbolística con la que se disputó la Copa Intercontinental hasta 2004, no ha faltado nunca a la cita.
Y no hay que olvidar, que los equipos europeos y sudamericanos están clasificados directamente para las semifinales del torneo mundialista de clubes.
“Duele decirlo, pero hay una diferencia enorme en todos los aspectos respecto a los clubes europeos, más que nada en lo físico, en la preparación que tienen”, dijo el argentino César Delgado, cuando su equipo, el Monterrey mexicano, perdió en semifinales del Mundial de Clubes de 2012 contra Chelsea.
Aquella edición fue una de las tres veces que el representante sudamericano ganó al europeo en la final, ya que Corinthians venció al Chelsea en el partido por el título (1-0).
La primera vez que un equipo sudamericano se quedó sin final, fue en 2010, en Emiratos Árabes Unidos, cuando el desconocido Mezembe congoleño dio una lección al Internacional de Porto Alegre y le derrotó por 2-0, con goles en la segunda parte de Luwulwabo Kabangu y de Alain Kaluyituka.
Pese a que el equipo brasileño tenía un jugador de prestigio mundial como el argentino Andrés d’Alessandro, un joven que empezaba a despuntar como Oscar, al internacional Leandro Damiao y futbolistas que después hicieron carrera en Europa como Juan Jesús, Rafael Sobis o el arquero Kleber, no supo imponerse al poderío físico del campeón africano.
En cambio, los africanos no fueron rival para el Inter de Milán en la final, en la que los Neriazzurro se impusieron por un claro 3-0.
RONALDINHO FRACASÓ CON ATLÉTICO MINEIRO
No menos sorprendente fue lo ocurrido tres años después en Marruecos, cuando el representante local, el Raja Casablanca, derrotó sorprendentemente al Atlético Mineiro liderado por Ronaldinho y con internacionales como Gilberto Silva, Diego Tardelli y Lucas Moura.
Se adelantaron los locales al inicio de la segunda parte con un tanto de Mouhsine Iajour y Ronaldinho empató poco después de la hora de juego, pero los marroquíes consumaron la sorpresa en los últimos minutos, con un gol de penal de Mohsine Moutaouali y de Mabide Vivien en el alargue.
En la final, el campeón europeo, entonces el Bayern Múnich, tampoco tuvo problemas para colocarse la escarapela de campeón del mundo en el pecho, ganando por 2-0, con dos goles de Dante y Thiago Alcántara en los primeros 20 minutos.
En ambos precedentes, el campeón de la Libertadores salvó el honor de Sudamérica ganando el partido por el tercer puesto y ese debe ser ahora el objetivo de Atlético Nacional, que llegaba con la idea de hacer historia y representar a todo el continente, sobre todo tras la tragedia aérea del Chapecopense, y que puede regresar a Medellín como el peor equipo de la Conmebol en una cita mundialista.
Como dijo el técnico el colombiano Reinaldo Rueda tras “la gran amargura” de la derrota ante Kashima el equipo Verdolaga tiene que “acabar con dignidad” el torneo. “Ahora ya toca pensar en el partido del domingo, levantar cabeza y a pelear por el tercer puesto”, añadió el defensor Fariz Díaz.