El enigma del patrimonio de Lilian Samaniego: departamentos millonarios y deudas minimizadas
- En solo un año y medio, la senadora Lilian Samaniego compró seis departamentos valuados en G. 5.181 millones, con cuotas mensuales que superan los USD 10.000, más de lo que percibe en el Senado.
- La exquímica farmacéutica de IPS, quien comenzó con un sueldo de G. 558.700 en la función pública, experimentó un crecimiento patrimonial acelerado que no se condice con sus ingresos oficiales.
- Su rápida acumulación de propiedades se ve ensombrecida por su pasado en IPS, donde fue imputada en un escándalo de robo de medicamentos.

La senadora Lilian Samaniego ha consolidado un imperio inmobiliario que despierta interrogantes sobre el origen de su fortuna. En su última declaración jurada ante la Contraloría, se evidencia que, entre agosto de 2018 y febrero de 2020, adquirió seis departamentos en edificios de alto nivel por un total de G. 5.181 millones.
Los documentos detallan pagos contra entrega que superan los USD 200.000 y cuotas mensuales que llegan hasta los USD 10.000, compromisos financieros que exceden con creces su sueldo en el Senado.
Un caso llamativo es la compra de cuatro departamentos a la firma Victoria Desarrollos Inmobiliarios SA, donde registró un importe de G. 1.320 millones, pese a que el precio real de los inmuebles asciende a G. 3.086 millones. Este mecanismo le permitió reducir en un 57 % el valor declarado, trasladando la diferencia a “deudas”.
El crecimiento de su patrimonio no es reciente. En 2023, su declaración jurada reflejó la tenencia de ocho departamentos valuados entre USD 100.000 y USD 200.000 cada uno, cinco viviendas, una casa de verano en San Bernardino y una decena de terrenos en zonas privilegiadas de Asunción, totalizando G. 8.691 millones.

El ascenso financiero de Lilian Samaniego se remonta a sus tiempos en el Instituto de Previsión Social (IPS), donde ingresó con un sueldo de G. 558.700. Desde entonces, sus inversiones en bienes raíces han crecido exponencialmente, aunque sus ingresos oficiales como funcionaria no justifican semejante escalada patrimonial.

A este panorama se suma su vínculo con el escándalo de robo de medicamentos en el IPS en 1998. En aquel entonces, Samaniego se desempeñaba como jefa del Parque Sanitario y fue imputada tras el hallazgo de medicamentos robados en un camión de su propiedad. Según el Ministerio Público, “había indicios suficientes para procesarla”, aunque logró sortear las acusaciones sin mayores consecuencias.
Mientras la senadora critica la crisis económica y se erige como rescatista de los excluidos, su creciente patrimonio despierta dudas sobre la verdadera fuente de su fortuna. Como reflejan sus declaraciones juradas y los documentos de Catastro, su prosperidad parece estar cimentada en una ecuación en la que los modestos sueldos de la función pública han obrado milagros financieros.