Día Internacional de la Mujer: ¿Qué pasó el 8 de marzo de 1857?
- El día internacional de la mujer del 8 de marzo fue declarado por las Naciones Unidas en 1975.
- La explicación más plausible se remonta a mediados del siglo XIX. El 8 de marzo de 1857, miles de trabajadoras textiles decidieron salir a las calles de Nueva York para protestar por las míseras condiciones laborales y reivindicar un corte de horario.
- Esta fue una de las primeras manifestaciones para luchar por sus derechos, y distintos movimientos, sucesos y movilizaciones se sucedieron a partir de entonces. Siendo este episodio la referencia para fijar la fecha del “8M”.
El día internacional de la mujer del 8 de marzo fue declarado por las Naciones Unidas en 1975. Dos años más tarde se convirtió en el Día Internacional de la Mujer y la Paz Internacional. En Estados Unidos se celebra oficialmente tan solo desde 1994, a pesar de que es en aquel país donde se encuentran los orígenes de la conmemoración.
La explicación más plausible se remonta a mediados del siglo XIX, en plena revolución industrial. El 8 de marzo de 1857, miles de trabajadoras textiles decidieron salir a las calles de Nueva York con el lema “Pan y rosas” para protestar por las míseras condiciones laborales y reivindicar un recorte de horario y el fin del trabajo infantil.
Esta fue una de las primeras manifestaciones para luchar por sus derechos, y distintos movimientos, sucesos y movilizaciones se sucedieron a partir de entonces. Este episodio también sirvió de referencia para fija la fecha del Día Internacional de la Mujer en el 8 de marzo.
El capítulo más cruento de la lucha por los derechos de la mujer se produjo, sin embargo, el 25 de marzo de 1911, cuando se incendió la fábrica de camisas Triangle Shirtwaist de Nueva York. Un total de 123 mujeres y 23 hombres murieron. La mayoría eran jóvenes inmigrantes de entre 14 y 23 años.
Según el informe de los bomberos, una colilla mal apagada tirada en un cubo de restos de tela que no se había vaciado en dos meses fue el origen del incendio. Las trabajadoras y sus compañeros no pudieron escapar porque los responsables de la fábrica habían cerrado todas las puertas de escaleras y de las salidas, una práctica habitual entonces para evitar robos.
Al no poder huir, muchas de las trabajadores saltaron a la calle desde los pisos octavo, noveno y décimo del edificio. La mayoría de las víctimas murieron por quemaduras, asfixia, lesiones por impacto contundente o una combinación de estas causas.
El desastre industrial, el más mortífero de la historia de la ciudad, supuso la introducción de nuevas normas de seguridad y salud laboral en el país.