Condenan a ex sacerdote por intento de abuso sexual a catequista
- El ex sacerdote de la Iglesia Católica, Gustavo Ovelar, fue condenado este martes a cuatro años de cárcel por un caso de abuso sexual en grado de tentativa que fue denunciado por un catequista.
El ex sacerdote Gustavo Adolfo Ovelar fue denunciado por un joven catequista que aseguró ante la Fiscalía que el religioso intentó coaccionarlo. Ambos trabajaban en la misma parroquia.
La condena de cuatro años para el ex cura párroco fue unánime, ya que según los miembros del Tribunal, integrado por los jueces Julio Alfonso, Nancy Roa y Víctor Ortigoza, se probó el hecho denunciado.
Ovelar deberá cumplir la condena en la Penitenciaría Regional de Villarrica.
Por otra parte, pobladores de la ciudad donde está ubicada la parroquia señalaron que el ex sacerdote es inocente y que todo se trataría de un negociado.
Ante esa situación, se manifestaron este martes frente a la sede del Palacio de Justicia ubicado en el Departamento de Guairá.
Sonia Peralta Amarilla, una de las manifestantes, dijo a Última Hora que se le acusó injustamente al ex sacerdote.
“Esta es una injusticia para nuestro pa’i. Estos que se hacen llamar evangelizadores, saltaron varias páginas del evangelio para perjudicar al sacerdote. Ellos usan a otros jóvenes y ellos se prestaron para el mal“, señaló la mujer.
Dijo que el caso fue un supuesto negociado, alegando que habría dinero de por medio por cuestiones relacionadas a los retiros espirituales que se realizaban.
“La persona que le denunció al sacerdote es una víbora de 7 cabezas”, afirmó Peralta Amarilla.
Gustavo Adolfo Ovelar, quien desde hace varios meses se encontraba prófugo, finalmente fue sometido al juicio oral por el presunto hecho de tentativa de coacción sexual.
Ovelar se encontraba con prisión preventiva en la ciudad de Arroyos y Esteros y participó del juicio oral de manera virtual, por medio de la aplicación Zoom, debido a cuestiones de salud.
El ex curapárroco fue acusado por la Fiscalía por supuestamente haber intentado abusar de un joven catequista entre los años 2012 y 2013, en una parroquia donde el denunciado prestaba servicios.