¿Carga el teléfono en el auto?, por esta razón debería dejar de hacerlo

• Desde el momento en que el uso de teléfonos celulares se hizo popular, millones de personas se hicieron dependientes a la carga de la batería de estos dispositivos.
• A pesar de que en los últimos años se ha producido una notable evolución en términos de la duración, velocidad de recarga y eficiencia en el consumo de energía de las baterías de los smartphones, este componente sigue robándole la tranquilidad a los usuarios.

Por esta razón las personas suelen usar diferentes recursos para asegurarse de que su teléfono inteligente no se quede sin energía, sobre todo durante un momento crítico en el que se necesita contar con el equipo.

Prueba de ello es el hecho de que muchos usuarios utilicen su automóvil como un medio para cargar la batería de su celular. Aunque hoy en día es posible conseguir sin dificultad un adaptador para conectar el teléfono al carro, esta práctica no es del todo recomendable.

En primer lugar, es importante tener presente que el hecho de que existan adaptadores o conectores para recargar un teléfono no representa que hay una plena compatibilidad entre la batería del auto y la del móvil.

De hecho, en muchos casos la carga es mucho menos eficiente y por ende la energía en el dispositivo no durará mucho tiempo. Dicha situación no solo puede afectar al teléfono, pues también puede generar problemas en el automóvil.

La batería de un teléfono inteligente necesita un voltaje específico para recuperar y guardar energía, sin generar un desgaste necesario de sus células de recarga. Por lo tanto, al emplear un carro como fuente para carga, es altamente posible que el equipo reciba una corriente eléctrica más intensa y por ende habría sobrecalentamiento o un mayor desgaste en la pila.

Por esta razón los fabricantes de teléfonos inteligentes recomiendan utilizar el cargador y el cable que viene con el equipo, pues estos garantizan que el equipo reciba el voltaje que el equipo realmente necesita para funcionar correctamente.

El uso de algunas funciones que posee un carro representa un consumo de gasolina y energía de la batería del vehículo, ejemplo de ello es el aire acondicionado. Esta situación también ocurre cuando se carga el teléfono mediante el carro.

Pese a que el gasto de combustible y electricidad puede parecer bajo, pero la situación cambia si el automóvil también tiene encendido el aire acondicionado, las luces, su pantalla y el GPS.

Al recargar la pila del teléfono con un carro se genera un gasto innecesario de energía en la batería del automóvil, además, el celular tendrá una carga que durará mucho menos tiempo porque realmente no estará recargado por completo.

De modo que el usuario solo logrará acelerar del desgaste de la batería de su carro y en la del smartphone, pues el móvil tendrá una carga poco eficiente que acelerará el deterioro de sus celdas de energía internas.

Hay que tener presente que la batería de los teléfonos cuenta con ciclos de carga y, es clave comprender que dada uno de ello se completa cuando se llega al máximo del 100 % de carga. Por ello, es ideal recargar el dispositivo cuando se encuentre por debajo del 20 % y en lo posible se debe desconectar el equipo cuando alcanza la carga total.

Según las características de la batería y su sistema de carga rápida, es posible que la temperatura del dispositivo se eleve cuando este se conecta a una toma eléctrica. Por ello, se recomienda no utilizar el celular mientras se encuentra cargando, pues esta práctica puede generar un sobre calentamiento que podría dañar el procesador y la batería.

Algunos comerciantes ofrecen accesorios que son más económicos, pero son de una calidad inferior. Al usar réplicas el usuario expone su teléfono a que sufra un daño en su batería, por culpa de un cargador defectuoso.