Califican de lamentable la legalización del aborto en Argentina
- El Congreso de Argentina aprobó el proyecto que permite acceder libremente al aborto hasta la semana 14 de gestación. La decisión legislativa del vecino país genera el rechazo de organizaciones provida.
Una vez que la ley entre en vigor en Argentina, toda persona gestante podrá acceder al aborto en el sistema de Salud, de forma gratuita y segura, hasta la semana 14 de gestación.
Al respecto, Dannia Rios Nacif, miembro del Movimiento por la Vida y la Familia Paraguay, lamentó este hecho y consideró que “los argentinos decidieron abrir la puerta a asesinar a sus futuros ciudadanos“.
“Lo que sucede en Argentina es lamentable y lo primero que me vino a la mente es una frase que se le atribuye a Sarmiento (ex presidente argentino), que decía que al paraguayo hay que matarlo en el vientre de su madre. Hoy paradójicamente se cumple, pero en Argentina“, afirmó en contacto con Última Hora.
Sobre la situación de Paraguay, indicó que la Constitución Nacional en su artículo 4 refiere que la vida se protege desde la concepción y para que el aborto sea legal en el país, primero deberán cambiar la Carta Magna.
“Hoy en Paraguay el debate no es posible, ya que existe una máxima normativa que establece muy claramente que la vida se respeta. Entonces, que hoy propongan un proyecto de ley caería completamente inconstitucional“, remarcó Rios Nacif.
Sin embargo, dijo que existe un trabajo de subversión cultural que se viene haciendo a través del sistema educativo.
“Aquí en Paraguay no estamos ajenos a eso. Me remito a los materiales educativos, donde pregonan el principio del feminismo, donde hacen referencia a este tema del aborto de manera cubierta“, puntualizó y cuestionó que se apuesta a este tipo de contenidos “para adoctrinar a niños y jóvenes a no respetar al otro ser humano y a su proyecto de vida“.
El proyecto que permite acceder libremente al aborto hasta la semana 14 de gestación fue impulsado por el gobierno de Alberto Fernández y era un reclamo histórico de los colectivos feministas.
La normativa representa un fuerte cambio respecto a la situación actual —en la que solo se permite abortar legalmente si la mujer sufrió una violación o corre peligro su vida— y autoriza la objeción de conciencia de los facultativos que no quieran participar del aborto, pero siempre que deriven con rapidez a las pacientes a otros profesionales que lo lleven a cabo.