Arrastrada por la corrupción y ausente en el desfile
- El desfile de 14 de Mayo con una instrucción menos: Escuela Carmen Fossati de Flores.
- Se extinguió arrastrado por la corrupción que hizo quebrar a la Cooperativa Coronel Oviedo Ltda.
Los alumnos se dispersaron en distintas instituciones, y es que la Escuela Carmen Fossati de Flores, más conocida como Escuela Cooperativa, se extinguió luego de que la Comisión Liquidadora de la Cooperativa Coronel Oviedo Ltda, en noviembre del 2017, desalojó a la institución del predio donde funcionó por más de 20 años.
No fue en el primer intento que la Comisión Liquidadora integrada por Germán Wiggert, Gustavo Recalde y Enrique Yegros. En el año 2016 ya habían notificado para el desalojo, pero una gestión de la Comisión de Padres, ante el gobierno departamental, logró que la institución permanezca en el predio, tras la firma de un contrato de alquiler.
Instalada la crisis educativa, apareada a la debacle dirigencial de la Cooperativa Coronel Oviedo, la escuela Carmen Fossati de Flores fue arrastrada por un proceso de liquidación que buscaba recaudar, a través de la venta de inmuebles, para “calzar” la multimillonaria deuda fiduciaria, producto de la pésima gestión administrativa que habría iniciado con una injustificada e irresponsable idea de invertir en una industria alcoholera.
La nefasta decisión dirigencial condujo a un éxodo estudiantil paulatino, que de alrededor de 600 alumnos, en su mejor momento, se redujo drásticamente 282 alumnos en el 2016 cifra que no superó los 120 inscriptos en el 2017.
Esto conllevó al desarraigo de los alumnos, cuyos padres debieron buscar la forma de que continúen sus estudios escolares en otras instituciones, a riesgo de que muchos de ellos no fueran admitidos en una nueva comunidad educativa debido a la sobrepoblación ocasionada por el crecimiento natural de las mismas.
Hoy 14 de mayo, al igual que la Cooperativa Coronel Oviedo Ltda., la Escuela Carmen Fossati de Flores solo sobrevive en el recuerdo de padres y ex alumnos que debieron resignarse a perder la identidad educativa forjada durante dos décadas.
El hecho constituye un testimonio claro de la mediocridad dirigencial y la falta de interés de las autoridades educativas del MEC, quienes no supieron gerenciar la supervivencia de la institución y con ella evitar la traumática desaparición de una escuela emblemática de la ciudad.
A tres años de haberse instalada la crisis y con ella evidenciada la corrupción galopante en una institución cooperativa que dejó fuera del sistema financiero a más de 24 mil socios, los organismos jurisdiccionales, Ministerio Público y Poder Judicial, no han dado seguimiento a las denuncias presentadas, por lo que en Coronel Oviedo los corruptos gozan de buena salud.