Advierten a estar atentos ante intención de verter residuos líquidos al Tebicuary

• El médico ovetense Dr. Hugo Peña alertó sobre los riesgos de un eventual vertido de residuos líquidos del Gran Hospital de Coronel Oviedo al río Tebicuary.
• Este tipo de vertidos, según el especialista, podría desencadenar daños ecológicos y problemas sanitarios a largo plazo.
• Señaló que, sin sistemas adecuados, los vertidos hospitalarios podrían incluir restos de medicamentos y productos químicos tóxicos que afectarían tanto a la fauna acuática como a los habitantes de la región.

El médico ovetense Dr. Hugo Peña lanzó una enfática advertencia acerca de los riesgos que implicaría un eventual vertido de residuos líquidos provenientes del Gran Hospital de Coronel Oviedo al río Tebicuary. El profesional detalló las graves consecuencias ambientales y de salud pública que este tipo de práctica podría generar, haciendo un llamado a las autoridades y a la ciudadanía a mantenerse vigilantes.

El médico explicó que los residuos líquidos hospitalarios suelen contener altas concentraciones de agentes patógenos, sustancias químicas peligrosas y otros desechos tóxicos derivados de medicamentos, insumos médicos y procesos de desinfección. “No estamos hablando solo de agua contaminada. Estos vertidos podrían incluir restos de medicamentos, patógenos de muestras biológicas y químicos que afectan directamente la fauna acuática y la calidad del agua para consumo humano”, alertó.

Además, subrayó el impacto acumulativo que estos desechos pueden tener en la biodiversidad del río Tebicuary, que constituye un recurso hídrico vital para comunidades y sectores agrícolas de la región. “El Tebicuary no solo abastece agua a muchas poblaciones, sino que también es fundamental para las actividades agrícolas y ganaderas. Contaminarlo sería una irresponsabilidad con consecuencias a largo plazo”, afirmó.

Peña citó ejemplos internacionales para ilustrar los peligros de esta situación, mencionando cómo en otros países la gestión inadecuada de residuos hospitalarios ha provocado brotes de enfermedades infecciosas y desastres ecológicos. “Sabemos que hay tecnologías para tratar estos desechos de manera adecuada, pero eso requiere un compromiso serio por parte de las instituciones responsables”, agregó.

El Gran Hospital de Coronel Oviedo, actualmente en construcción y con gran expectativa para su apertura, ha sido objeto de cuestionamientos sobre la planificación de su manejo de residuos. Hasta el momento, no se anunció públicamente un plan detallado que contemple el tratamiento seguro de los líquidos residuales, lo que genera preocupación en la población y entre profesionales de la salud.

Peña instó a las autoridades locales y nacionales a garantizar que las instalaciones hospitalarias cuenten con sistemas de tratamiento de última generación para evitar que los desechos lleguen al Tebicuary. También animó a la ciudadanía a mantenerse informada y a exigir transparencia en la implementación de políticas de gestión ambiental.

“La salud pública y el medio ambiente están intrínsecamente ligados. Un río contaminado no solo destruye ecosistemas, sino que también pone en riesgo a las personas. No podemos ser indiferentes a esto”, concluyó.