“No es falta de agua, es falta de capacidad”: se multiplican las quejas contra Essap en Coronel Oviedo
- Cortes constantes, baja presión y desorganización marcan la gestión actual del sistema de agua potable.
- Usuarios denuncian improvisación e incapacidad en la administración local de Essap.
- A pesar de millonarias inversiones, la falta de planificación pone en jaque a más de 9.000 abonados.

La distribución de agua potable en Coronel Oviedo llegó a un punto crítico. Lo que antes era un proceso técnico planificado y eficiente, hoy es una rutina de reclamos, baldes vacíos y vecinos indignados.
Desde #TuDenuncia de OviedoPress, múltiples usuarios expresaron su malestar ante el creciente desorden en la provisión del servicio, cuya responsabilidad recae en la administración local de Essap, encabezada por Alan Escandriolo.
Distribuir agua no es cuestión de improvisación
El trabajo de distribución de agua no es simple: implica controlar presiones, tiempos de llenado de tanques, consumo en horas pico y manejo hidráulico.
Nada de eso parece estar ocurriendo correctamente. Los problemas comenzaron desde la llegada de la nueva administración.
“Antes funcionaba bien, ahora los cortes son diarios”, señala una usuaria que prefiere el anonimato.
Técnicos de la institución confirman que se cuenta con todos los elementos necesarios: tanques, bombas, personal. Lo que falta es capacidad técnica y planificación.

18 millones de dólares sin resultados visibles
En 2017, la Agencia de Cooperación Japonesa JICA invirtió 18 millones de dólares en una nueva planta de tratamiento en la cabecera del río Tebicuary.
Sin embargo, la Essap no logra garantizar un servicio continuo para los más de 9.000 usuarios en la ciudad.
Críticas también al presidente de Essap, Luis Fernando Bernal
El presidente de la Essap, Luis Fernando Bernal, también es objeto de fuertes críticas. Concejales de Coronel Oviedo lo acusan de desinterés ante múltiples problemas:
Ruptura de calles asfaltadas por fugas no reparadas, colapso de la planta de tratamiento cloacal, falta de gestión para mejorar la red de distribución.
La comunidad exige cambios urgentes
La ciudadanía exige que se designen profesionales con formación y experiencia, no improvisados ni premiados por vínculos políticos.
“La distribución de agua requiere cálculo, trabajo y compromiso. No se puede dejar en manos de cualquiera”, expresan indignados los vecinos del barrio 12 de Junio, uno de los más afectados.
Conclusión: el agua es un derecho, no un favor político
Desde OviedoPress, nos sumamos al llamado urgente: el agua es un derecho humano esencial, y no puede estar a merced de la incompetencia o el clientelismo.
Las autoridades deben actuar con seriedad antes de que esta crisis derive en una tragedia sanitaria.
