Cartismo ahora duda sobre Abdo Benítez
- Tras impulsar el “des-desafuero” para proteger a sus senadores procesados, el movimiento de Horacio Cartes ahora duda sobre el desafuero de Mario Abdo Benítez, solicitado por el propio expresidente.
- La restitución inconstitucional de fueros a Erico Galeano y Hernán Rivas desató una fuerte reacción jurídica y política, con denuncias contra 23 senadores y una respuesta ambigua del oficialismo.
- La indecisión cartista sobre el desafuero de Abdo Benítez refleja el temor a sentar un precedente que podría volverse en su contra, mientras crece la crisis de confianza en la Justicia paraguaya.
La crisis político-judicial generada por el cartismo y sus aliados con la restitución inconstitucional de los fueros a senadores procesados ha tomado un giro inesperado. Ahora que el expresidente Mario Abdo Benítez solicitó ser desaforado para enfrentar una imputación en su contra, el movimiento Honor Colorado, liderado por Horacio Cartes, parece dudar sobre cómo proceder.
El desafuero de Abdo Benítez había sido una de las principales obsesiones del cartismo en 2024. Sin embargo, en abril de ese año, al no contar con los votos necesarios para retirarle la inmunidad parlamentaria al exmandatario, los cartistas orquestaron una maniobra sin precedentes: repusieron los fueros a los senadores Erico Galeano y Hernán Rivas, quienes ya habían sido desaforados para enfrentar procesos judiciales. Esta decisión, conocida como “des-desafuero”, también benefició colateralmente al senador Rafael Filizzola, quien recientemente fue sobreseído en el caso helicópteros.
La medida fue duramente criticada por juristas y el Colegio de Abogados de Paraguay, que denunció penalmente a 23 senadores por considerar la decisión inconstitucional. A pesar de la defensa de la medida por parte del presidente Santiago Peña y otros referentes cartistas, el juez Osmar Legal determinó que el “desdesafuero” no tenía validez legal y que Galeano seguía sin inmunidad, pues había sido imputado cuando aún era diputado.
Ante la presión y el rechazo generalizado, el cartismo finalmente reculó el 17 de abril y anuló la reposición de los fueros. Sin embargo, la fiscala Patricia Sánchez, quien debía investigar posibles delitos en esta votación, no avanzó en la pesquisa y solicitó el sobreseimiento provisional de Rivas.
Ahora, con la solicitud de desafuero de Abdo Benítez, el cartismo se muestra dubitativo. La falta de una definición clara deja en evidencia la contradicción de su estrategia política y su temor a sentar un precedente que pueda volverse en su contra.
