Deficiencias en la implementación del programa “Hambre Cero” en la Escuela del Futuro
- El director de la Escuela del Futuro, Blas González, denunció problemas en la implementación del programa “Hambre Cero” debido a fallas de la empresa proveedora y carencias de infraestructura.
- Durante los primeros días del programa, la empresa Campo Verde no contaba con el personal ni los insumos necesarios, generando dificultades en la distribución de los alimentos a los estudiantes.
- Pese a los problemas iniciales, la institución y los padres trabajan en conjunto para mejorar las condiciones, aunque persisten desafíos relacionados con la infraestructura y la organización del servicio de comedor.

La implementación del programa “Hambre Cero” en la Escuela del Futuro ha presentado deficiencias desde su inicio, según manifestó el director de la institución, Blas González, en una entrevista en el programa Hablando Claro de Radio América 95.3 FM.
El primer día del programa, la empresa proveedora Campo Verde enfrentó problemas debido a la falta de personal y de algunos insumos necesarios para la preparación de los alimentos. “No se pudo terminar a tiempo, pero con el equipo docente logramos subsanar la situación para que los niños pudieran comer ese día”, explicó González. A pesar de los ajustes, hasta la fecha de la entrevista, la empresa aún no había entregado todos los implementos necesarios, aunque sí se había logrado garantizar la alimentación para todos los estudiantes.

El director informó que los inconvenientes fueron reportados a la supervisión educativa y documentados en un informe elevado a la Gobernación. Además, se mantuvo un diálogo con la empresa proveedora para evitar que la situación se repita. González también asumió el compromiso de controlar el trabajo de la empresa proveedora, ya que los personales responden a la empresa contratada. “Aquí está en juego la alimentación de los niños, hay que cuidar todos los detalles”, subrayó. Afirmó que los problemas del primer día se van subsanando progresivamente.
González aclaró que el problema de infraestructura afecta la distribución de los alimentos, ya que la escuela no cuenta con un comedor amplio. “Los niños con doble escolaridad están comiendo en las salas de clase, y la empresa sirve los alimentos directamente en cada aula. Un grupo del tercer ciclo come bajo la sombra, pero seguimos improvisando en algunos aspectos”, detalló. Como parte de las soluciones, los padres están colaborando en la construcción de una cocina, aunque aún falta un comedor adecuado.
En cuanto a la cantidad de alimentos, González aseguró que la comida es suficiente para todos los alumnos. “Hay niños que no comen casi nada, y siempre sobra o alcanza la comida. También hay casos de niños cuyos padres les llevan comida debido a dietas específicas”, indicó.
Sobre la relación con los padres, el director destacó que, aunque persisten algunas actitudes reacias al cambio, la institución mantiene el diálogo abierto para resolver cualquier inconveniente. “Estamos trabajando de manera coordinada y creemos que la situación se está normalizando”, afirmó. Además, instó a denunciar a las empresas que no cumplen con sus compromisos, ya que se trata de un servicio que es pagado y debe garantizar calidad en la alimentación de los niños.
Actualmente, la Escuela del Futuro alberga a 940 estudiantes desde la educación inicial hasta el noveno grado, y junto con el colegio Capitán Juan Alberto Roa, que funciona en el mismo predio, la matrícula supera los 1.100 alumnos. Ante la magnitud del alumnado, la mejora en la infraestructura y la correcta implementación del programa “Hambre Cero” siguen siendo desafíos pendientes para la institución.
