Silvio “Trato apu’a” Ovelar afirmó que por tradición él y otros parlamentarios llevan a su parentela al Congreso
- El senador Beto Ovelar generó controversia al admitir que, como muchos parlamentarios, llevó a familiares a cargos cercanos en el Congreso, incluido su hijo, aunque inicialmente no estaba de acuerdo con su contratación.
- Lo hizo durante una conferencia fue dirigida a alumnos de la Universidad de San Lorenzo en el salón COOPAFIOL de Coronel Oviedo y reconoció haber cometido errores al hablar sobre la formación académica de su hijo, admitiendo haber dicho “pelotudeces” y generalizado sobre la educación en ciertas regiones.
- Ovelar abordó también el tema de la corrupción, admitiendo haber comprado votos en el pasado pero negando haber estado involucrado en actos de corrupción relacionados con fondos públicos.
El senador Silvio Beto Ovelar participó en una conferencia en dirigida a alumnos de la Universidad de San Lorenzo (UNISAL) en el salón de la COOPAFIOL de Coronel Oviedo el pasado jueves, donde respondió preguntas de los estudiantes. Durante la conferencia, Ovelar fue cuestionado por su lenguaje, al utilizar groserías y expresiones informales.
Los alumnos abordaron diversos temas, incluidos los “nepobabys”, la contratación de su hijo Alejandro Ovelar en el Senado, y la corrupción. En relación con los “nepobabys”, mencionó que es una “tradición” llevar a personas de confianza, incluidos familiares, a cargos cercanos en el Congreso incluido él con relación a su hijo, reconociendo que esta práctica puede interpretarse como incorrecta. “Ocurre que nuestro país tiene una tradición, las irregularidades y los malos manejos que los parlamentarios cuando llegamos al Congreso, generalmente queremos llevar a gente de nuestra confianza en los cargos más cercanos. Muchos de ellos, entre los que yo me incluyo, llevamos a nuestros familiares de manera incorrecta, según mi interpretación”, manifestó.
Sin embargo, continuó su exposición asegurando que, en el caso de su hijo, fue la madre quien facilitó su contratación. “Cuando surgió lo de mi hijo, él no vive conmigo, es hijo de soltero y la mamá es la que le llevó a la Cámara de Diputados. Yo no estaba de acuerdo, pero iba a ser una confrontación entre padre e hijo y tuve que aceptar. Pero cuando surgió el escándalo, quién fue el único hijo de, que renunció al cargo, fue mi hijo porque yo no estaba de acuerdo en un principio”, expresó el parlamentario.
Sobre los comentarios pasados sobre la formación académica de su hijo, Ovelar admitió haber dicho “pelotudeces” por tratarse de su hijo, y reconoció haber generalizado al hablar de la mediocridad en la educación en ciertas regiones, como Tembiapora.
“Mi desafortunada exposición, ocurre que cuando tu hijo está en juego ya decís pelotudeces, entonces yo me metí una paja extraordinaria al decir lo de top. Y cuando hablé de la mediocridad me equivoqué al generalizar porque yo conozco docentes muy calificados. Lo que quise decir fue una teoría que maneja un gran pensador, Shandel habla de la meritocracia. Dice que la gente del interior, del fondo, del Paraguay profundo, que se forma, que va surgiendo tiene mucho más mérito que mis hijos y de los hijos de las familias más afortunadas porque lo hacen bajo su esfuerzo, bajo el logro”, sostuvo, asegurando estar arrepentido porque perjudicó a su hijo con sus palabras.
“Yo reconozco mis errores o ustedes me ven orgulloso por la puñeta que hice o por el disparate que dije. Yo me equivoqué y le perjudiqué enormemente a mi hijo con eso”, agregó.
En cuanto a la corrupción, el senador indicó que es un problema endémico en el país y admitió haber sido corrupto al comprar votos en el pasado, pero aseguró que nunca ha estado involucrado en actos de corrupción relacionados con fondos públicos.
“Tuve la suerte, a los 30 años ya fui gobernador, qué linda democracia. Gobernador y soltero. Eso fue en el año 1998, hoy estamos en el año 2024. Fui gobernador, hace 20 años soy senador de la nación y soy el único político que al entrar a la función pública muestra su declaración jurada de bienes sin que nadie le pida y entrego a la prensa para que vea y haga una trazabilidad. De mí se puede decir miles de cosas, que soy un metepata, bocón, que digo disparates y que hago un montón de cosas, pero creo que nunca van a escuchar que estoy metido en actos de corrupción, que estoy amañando una licitación o que está tratando de sacar coima de acá”, se explayó.
Acotó que no está orgulloso de que se le haya quedado el mote de “Trato Apu’a” e insistió en que no es corrupto. “A mí me da por las bolas, a mí me molesta enormemente porque cometí un error de la puta madre en su momento. Pero yo pido disculpas y como ser humano puede equivocarse. Pero no soy de los que niega y trata de mantenerse en el error. Pero actos de corrupción, de desvío de fondos no van a encontrar”, aseveró.