Fiscal Enrique Fornero afirmó que encontró importantes datos contra los hermanos policías Rivarola Galeano

• El mandamiento judicial emanado por el Juzgado penal de Itapúa me autorizó a buscar libros de novedades y también notas de servicios ante la sospecha que agentes policiales mexicanearon una avioneta narco.
• Al menos uno de los policías no asistió a su lugar de trabajo el día en que ocurrió la mexicaneada.

Casi trescientos kilómetros viajó desde Encarnación hasta Coronel Oviedo el fiscal Enrique Fornero para iniciar trámites de investigación contra cuatro agentes policiales de Caaguazú, implicados en una supuesta apropiación de drogas.

“Resaltar que el jefe del departamento de investigaciones de Caaguazú, el comisario principal Ricardo Alonso, voluntariamente me ha entregado estos libros de novedades y las notas de servicio que afectan a estos funcionarios policiales. Él mismo me entregó voluntariamente”, manifestó el agente del Ministerio Público.

Los policías, Cristian David alias Ka’í, Justino alias Aguará, Benigno Póra y Rufino Rivarola alias Cacique ya fueron trasladados a otras reparticiones, pero continúan en las filas policiales y aún no han sido imputados. No obstante manifestó que durante el allanamiento se encontraron algunos documentos que demuestran que existen irregularidades con respecto, al menos dos, de los involucrados.

En el lugar encontraron los libros de novedades que fueron trasladados a su oficina en la capital del departamento de Itapúa para analizarlos y unir los cabos.

En los registros pudo notar que el suboficial Cristian Rivarola Galeano, no estuvo en la sede regional de Campo 9, pero su firma no figura. El día 1 de junio, el policía no estuvo en su lugar de trabajo. “Tengo información en estos libros y notas acerca de dos agentes de apellido Rivarola Galeano, en los que hay inconsistencias. Como que esos días de los hechos no estaban prestando servicio, pero figuraba que debían estar aquí. A uno de ellos le falta la firma en la notificación de su guardia”, expresó el representante del Ministerio Público.

El fiscal explicó que tendría que ver con una supuesta “mexicaneada” de una supuesta avioneta boliviana que supuestamente, estos agentes policiales sustrajeron 300 kilos de cocaína y 200 kilos de pasta base. “Tengo mucha tarea por delante y traté de poner mi mayor esfuerzo para que esta denuncia que se hizo en su momento, en junio de este año se esclarezca. Yo creo que todo lo que hoy esté llevando me va a dar muy buena información y vamos a seguir al norte. Para ver el grado de participación de estos agentes policiales”, refirió.

El caso le fue asignado al fiscal recientemente, pero se inició en Caazapá al descubrirse que tenía vinculación con una carga que desapareció de una estancia en General Artigas. El fiscal de Caazapá se inhibió y pidió que vaya a Encarnación. “A partir de esas informaciones solicité al juzgado un mandamiento de allanamiento para cumplir en esta ciudad”, añadió Forenero.

El fiscal solicitó además datos a las telefonías sobre las ubicaciones de cada uno de ellos, los días en que ocurrieron los hechos.