Fiscalía pide juicio contra exjefe de Policía
- La Fiscalía formuló acusación y pidió que se eleve a juicio oral y público la causa contra el exjefe de la Policía Nacional paraguaya Francisco Alvarenga y su esposa Mirta Rotela, ambos acusados de presunta corrupción.
Los fiscales a cargo de la causa consideraron que el matrimonio obtuvo en los últimos diez años “un aumento desmedido en los bienes que comprenden su patrimonio” y que no es compatible con “sus legítimas posibilidades económicas”, según un comunicado de la Fiscalía. Según informa el medio digital Paraguay.com.
Concluyeron que este aumento patrimonial “fue logrado de forma ilegal y aprovechándose de la función pública“, y acusaron a ambos del delito de enriquecimiento ilícito.
El comunicado cita un aumento patrimonial de los acusados consistente en la compra de varios vehículos automotores, un tractor, un vehículo con cero kilómetros asegurado con una cuantiosa póliza y varios departamentos en diferentes edificios de Asunción.
Además de estancias de varias hectáreas de tierra, múltiples terrenos y una participación como accionistas en una empresa de seguridad, según Fiscalía.
El patrimonio declarado por Alvarenga al ser nombrado comandante de la Policía paraguaya en 2013 fue de 226 millones de guaraníes en bienes inmuebles (unos 41.000 dólares), mientras que, tras ser destituido del cargo en 2015, declaró un patrimonio de 2.400 millones de guaraníes (unos 436.000 dólares), multiplicando en más de 10 veces el valor de sus bienes.
Su esposa ejercía su cargo como funcionaria del Ministerio de Salud con un salario de 3.360.000 guaraníes (unos 600 dólares), por lo que le era absolutamente imposible adquirir bienes costosos y en gran cantidad, según la Fiscalía.
Además de la acusación contra la pareja, la Fiscalía procesó al hijo de ambos, Francisco Alvarenga Rotela, por presunto lavado de dinero.
Según el Ministerio Público, Alvarenga Rotela compró un vehículo Mercedes Benz valorado en 33 millones de guaraníes (unos 6.000 dólares), pese a que no contaba con un trabajo estable conocido que pudiera servir como respaldo legal de la compra.
El hijo del exjefe de la Policía no aclaró la procedencia del dinero en el momento de la compra, por lo que la Fiscalía sospecha que este monto procedía del presunto enriquecimiento ilícito en la función pública cometido por sus padres.
Además de por estos hechos, el antiguo jefe policial fue imputado en 2015 junto a otras nueve personas por su presunta relación con una supuesta trama policial que desviaba fondos procedentes del combustible que la compañía estatal Petropar suministra a la Comandancia de Policía.
Alvarenga fue cesado en mayo de 2015 por estos hechos, y le sustituyó Críspulo Sotelo como nuevo jefe de la Policía Nacional, quien tras asumir el mando reveló la existencia de una deuda de unos G. 7.000 millones (USD 1,4 millones) en una auditoría realizada tras el cese.
