Colegio Parroquial expulsó a alumnas por presión de 25 padres
- Los 25 padres de los compañeros de dos alumnas del preescolar advirtieron que si las mismas siguen en la institución, sus hijos dejarán de asistir a clases.
- Otro de los motivos de la expulsión es el incumplimiento, por parte de la madre, al mandato de un tratamiento sicológico externo, dada por la dirección de la institución.
- “No podemos pegarnos el lujo y permitir que 25 niños dejen de asistir a la escuela”, dijo la asesora jurídica, Liliana Corvalán.
Los directivos de la Escuela 1095, Nuestra Señora de la Asunción, llamaron a rueda de prensa en la mañana de este viernes, con el objetivo de explicar la posición institucional en relación a la inadmisión de tres niñas, de una misma familia, al centro educativo, desde el pasado 14 de setiembre, según se publicaba este jueves en nuestro medio.
La directora de la escuela, Sonia Garcete de Balmoriz, afirma que las alumnas del preescolar tienen actitud violenta. Consultada sobre las actitudes consideradas violentas dijo que no puede precisar porque se trata de dos menores de edad.
También dijo que no podría afirmar si las niñas tienen trastornos sicológicos, teniendo en cuenta que la misma no es profesional del área. “Yo no voy a hablar de trastornos sicológicos, no soy sicóloga”, respondió consultada sobre el asunto.
Contradictoriamente, manifestó que “esta no es una institución donde se realiza tratamiento, sino que se hace observaciones de las sicólogas para seguir tratamientos externos”, con lo que sugiere que las niñas sí sufren de algún tipo de trastorno.
Sobre el punto dijo que la madre de las infantes no cumplió la indicación institucional que hace referencia a un tratamiento sicológico con profesionales externos a la institución.
Asintió que la conducta violenta de las preescolares ameritó asumir la determinación de inadmitirlas en la institución, desde el pasado 14 de setiembre, a pesar de una resolución judicial que ordenó la inscripción de las niñas.
Por su parte, la asesora jurídica de la institución, Lilian Corvalán dijo que existe una manifestación colectiva de padres de los 25 compañeros de las niñas en cuestión, que condicionaron la permanencia de sus hijos en la institución, si las dos preescolares son excluidas del grupo escolar.
“Esta institución no puede permitirse y pegarse el lujo de dejar sin escuela a 25 alumnos, por la actitud descuidada de una madre”, afirmó la profesional abogada.
Finalmente, la directora de la escuela, expresó que la decisión de expulsar a las alumnas se basa en el condicionamiento documentado de los padres, quienes afirman que retirarán a sus hijos de la institución en caso de que los directivos no tomaran una resolución en el caso de las dos alumnas.
A diferencia de la directora Sonia Garcete de Balmoriz, la abogada Liliana Corvalán dijo que no se trata de que las niñas sean un peligro para sus compañeros, “se trata de que la madre de las niñas no cumplió con la exigencia institucional de un tratamiento sicológico externo para sus hijas”, insistió.
Garcete de Balmoriz explicó que desde el departamento sicológico de la institución se trata de ayudar a los padres para que el comportamiento de los niños mejore, pero que en este caso la madre de las niñas no actuó en base a las recomendaciones.
Sobre el episodio de este jueves, en el que las niñas fueron impedidas a ingresar a la institución y obstaculizadas por guardias que portaban armas de fuego y arma blanca, la abogada dijo que fue en cumplimiento de una sentencia judicial que revoca el amparo promovido por la madre de las niñas y que fue en uso de la atribución de la propia directora Garcete de Balmoriz, respaldada por el documento judicial.
Tanto las autoridades educativas, como la asesora jurídica, minimizaron el hecho de que las alumnas, faltando dos meses para que expire el año escolar, sean excluidas del grupo escolar y desarraigadas de centro educativo al cual acuden desde el año 2014, expresando que de igual manera, otras instituciones podrán admitirlas “sin ningún problema”.
Durante la rueda de prensa convocada, tanto la directora de la escuela como la asesora jurídica, en reiteradas ocasiones invocaron la inconducta de las niñas, como causal principal de la expulsión, sin embargo, ante la requisitoria de los representantes de medios, no supieron precisar los casos en los que, supuestamente, incurrieron en flagrante violación del reglamento interno.
Afirmaron que no están obligados a proveer o exhibir los casos por los cuales determinaron la expulsión de las alumnas.
Por su parte, la madre de las niñas involucradas, niega rotundamente haber recibido notificaciones o emplazamientos que la obligue a someter a sus hijas a un tratamiento sicológico y que tampoco existe un sumario documentado de la inconducta basada en la actitud violenta de sus hijas, tal y como afirmaron los representantes de la institución.