El Senado definirá mañana si el criadazgo se convierte en crimen en nuestro país
- El Senado decidirá mañana si el criadazgo, práctica que afecta a miles de niños y niñas, se tipifica como un delito penal con penas de hasta 20 años de cárcel.
- Según una investigación, cerca de 47.000 niños y niñas están en situación de criadazgo, siendo las niñas las más afectadas por esta forma de explotación.
- El ministro de la Niñez, Walter Gutiérrez, advirtió que históricamente es más grave robar ganado que someter a un niño a condiciones de cuasi esclavitud.

Mañana, la Cámara de Senadores debatirá un proyecto de ley clave que busca criminalizar el criadazgo , una práctica todavía vigente que afecta principalmente a niñas, y que fue históricamente normalizada bajo el pretexto de brindar asistencia a menores en situación de pobreza.
El proyecto, impulsado por las diputadas Delia Estigarribia (PLRA) y Johanna Ortega (PPS), propone penas de 3 a 8 años de prisión para quienes reciban a un menor de edad en su hogar y lo sometan a un régimen de criadazgo. En caso de agravantes —como que la víctima sea menor de 14 años o sufra lesiones graves— la pena podría alcanzar hasta 20 años de cárcel.
El criadazgo se define en la iniciativa como la ubicación de niños, niñas o adolescentes en casas particulares para realizar tareas domésticas o en negocios familiares, bajo la falsa promesa de brindarles educación, salud, alimentación y vivienda. Según datos de una investigación de 2011, se estima que alrededor de 47.000 niños y niñas se encontraban en esta situación.
La Corte Suprema de Justicia, que apoyó la iniciativa, sugirió incluir la penalización dentro del Código Penal y hacer del criadazgo un delito autónomo, destacando que esta práctica vulnera múltiples derechos fundamentales y puede derivar en delitos como maltrato, explotación sexual y trata de personas.
El ministro de la Niñez y la Adolescencia, Walter Gutiérrez, expresó durante una reunión de la Comisión de Familia que ocho de cada diez víctimas de explotación sexual fueron antes “criaditas”. Subrayó la necesidad de una definición clara en la ley para evitar confusiones entre explotación y actos de ayuda genuina, pero también recordó que “en Paraguay siempre ha sido más grave robar una vaca que someter a un niño o niña a un régimen de cuasi esclavitud”.
Diversos organismos internacionales, como el Comité de Derechos del Niño de la ONU y el Departamento de Trabajo de los Estados Unidos, instaron al Estado paraguayo a tipificar el criadazgo como delito y a adoptar políticas públicas más firmes para su erradicación.